¿Cómo Reconocer un Diamante Auténtico?

Si hemos heredado un diamante y estamos considerando venderlo, es esencial verificar su autenticidad, incluso si se trata de una reliquia familiar transmitida de generación en generación. No podemos descartar la posibilidad de que sea una imitación. Aunque cuente con un certificado de autenticidad antiguo, esto no garantiza que la piedra actual sea auténtica, ya que el certificado podría corresponder a un diamante diferente que, con el tiempo, podría haberse extraviado.

Vender una imitación de diamante como si fuera auténtico, incluso sin saberlo, constituye un fraude. Si el comprador descubre que ha adquirido una falsificación, estaríamos legalmente obligados a indemnizarlo. Entonces, ¿cómo podemos saber si un diamante es auténtico?

Diamante real vs falso: ¿Cómo reconocerlos?

Existen varias pruebas caseras que supuestamente ayudan a identificar un diamante real.

• Prueba de agua: si dejamos caer un diamante auténtico en un vaso de agua, este se hundirá, mientras que uno falso flotará. Sin embargo, esta 'prueba' contradice los principios científicos básicos: cualquier objeto más denso que el agua, ya sea un diamante o no, se hundirá.
• Prueba de aliento: si respiramos sobre un diamante, este se empañará por un instante; en cambio, uno falso permanecerá transparente. Aunque esta prueba no es fiable en absoluto, su origen está relacionado con un gesto común entre los gemólogos. En ocasiones, los gemólogos empañan el diamante con su aliento para reducir momentáneamente su brillo y poder evaluar su color. No obstante, este procedimiento nunca se utiliza para determinar su autenticidad.
• Prueba del periódico: Al colocar un diamante sobre un texto pequeño, un diamante auténtico no permitirá que las letras sean visibles a través de él, en cambio, un diamante falso sí lo hará. A diferencia de las pruebas anteriores, esta tiene algo de validez, ya que la estructura del diamante es similar a la de una caja de espejos, lo que impide ver a través de él cuando se coloca con la culata hacia arriba. Sin embargo, sigue siendo una simplificación excesiva, ya que no tiene en cuenta factores como la talla o el tamaño de la piedra.

Incluso si realizáramos estas pruebas, sus resultados no pueden considerarse como una prueba concluyente de la autenticidad de un diamante. Por lo tanto, centrémonos ahora en la forma correcta de identificarlo.

Inspección Visual: Características Clave a Observar

​​Una inspección visual es definitivamente más eficaz que las pruebas caseras para determinar si un diamante es auténtico, pero debe realizarse con una lupa de 10x de aumento. Estas son algunas de las características clave a las que se deben prestar especial atención: 

• Talla y Brillo: Esto se refiere a las características distintivas del diamante: la talla (corte) y su destello. La prueba se realiza colocando el diamante frente a un espejo, de modo que una de sus facetas refleje la luz. Al posicionar un diamante auténtico de esta manera, exhibirá lo que se conoce como "brillo adamantino", un resplandor intenso y nítido. No obstante, se requiere un ojo entrenado y, aún más importante, un punto de comparación para poder reconocerlo.
• Bordes Afilados: Los diamantes son piedras extremadamente duras (clasificadas en el puesto 10 de la escala de Mohs). Si, al observarlos con una lupa, los bordes parecen desgastados, esto podría indicar que se trata de una falsificación. Por lo general, un diamante auténtico puede estar ligeramente astillado, pero sus bordes permanecen afilados.

Examinar una piedra es una experiencia fascinante, pero para apreciarla en su totalidad, es mejor hacerlo con la guía de un experto que nos explique cómo saber si un diamante es real. Observar un diamante con una lupa permite, entre otras cosas, identificar posibles defectos e inclusiones. Aun contando con un certificado de autenticidad, un observador experto debe utilizar el mapa de inclusiones para asegurarse de que el certificado coincida con la piedra.

¿Cómo Encontrar un Gemólogo Fiable?

La inspección profesional de un diamante no puede ser reemplazada por la inspección visual de un amateur. Por lo tanto, ya sea que quieras comprar o vender diamantes, es fundamental contar con la participación de un gemólogo, ya que son los únicos que realmente saben cómo identificar un diamante genuino.

Los gemólogos cuentan con una formación muy amplia, lograda a través del estudio y la experiencia. Por esta razón, los gemólogos más fiables son, sin duda, aquellos que han estado activos durante muchos años y han examinado numerosas piedras. La valoración debe realizarse de forma independiente, sin intereses comerciales. La autenticidad de un diamante es evaluada principalmente por los laboratorios gemológicos, como el GIA o el IGI, que, a cambio de un monto, emiten un documento que detalla las propiedades físicas de la piedra, pero nunca proporcionan una valoración económica.

Auctentic, al contar con un equipo de gemólogos certificados por el IGI y el GIA, ofrece evaluaciones gratuitas de la piedra, incluida la identificación de su valor en el mercado. Además, a diferencia de una casa de subastas, que tiene largos tiempos de espera y comisiones elevadas, Auctentic permite realizar ventas inmediatas sin cargos, adaptándose al rápido ritmo del mercado de diamantes.