Joyas de Esmeraldas: las más famosas subastadas en Christie's

La histórica casa de subastas británica cuenta con una historia centenaria en la que siempre ha estado involucrada en transacciones privadas de alto perfil, además de contar con sucursales en las ciudades más importantes del mundo: Nueva York, París, Ginebra, Los Ángeles, Ámsterdam, Hong Kong, Singapur, Bangkok. La primera sede histórica es la de Londres, donde su fundador, James Christie, realizó la primera venta en Londres, Inglaterra, el 5 de diciembre de 1766. Durante su larga historia de subastas internacionales, la casa de subastas Christie's ha acumulado ventas de joyas de gran valor, incluidas esmeraldas preciosas que pertenecieron a los grandes gobernantes españoles y a la realeza británica, a los Romanov y Bonaparte, a los emperadores mogoles y a los Shah de Persia. Aquí están los 10 más famosos.

El anillo de esmeralda y diamantes Rockefeller-Winston

En 1930, John D. Rockefeller, Jr. le compró a su esposa Abby Aldrich una esmeralda de impecable color y claridad, montada en un broche. Unos 20 años más tarde, su esposa falleció y, precisamente en esa ocasión, Rockefeller hizo desmontar el broche para poder dividir equitativamente entre sus hijos las esmeraldas de la montura. La piedra de esmeralda central, que pesa 18,04 quilates, fue donada a David Rockefeller, quien recurrió a Raymond Yard para que la montara como anillo. La esmeralda Rockefeller fue subastada por Christie's en el verano de 2017, antes de convertirse oficialmente en propiedad de Harry Winston en 2018, a un precio de 5 511 500 dólares, o 305 500 dólares por quilate. Una vez finalizada la venta, la gema pasó a llamarse esmeralda Rockefeller-Winston.

El broche de esmeralda y diamante de Elizabeth Taylor

En la historia de las subastas internacionales no podemos dejar de recordar también el broche de esmeralda y diamante de Bulgari, vendido en la filial Christie's de Nueva York en el invierno de 2011. Su marido Richard Burton cuenta que “Bulgari” era la única palabra italiana conocida por la actriz. Durante el rodaje de Cleopatra, Burton se encontraba en Roma, donde compró el broche de esmeraldas y diamantes para su novia, que luego usaría el día de su boda, en 1964. La venta tuvo lugar durante la subasta de joyas The Collection of Elizabeth Taylor: The Legendary Jewels Evening Sale en diciembre de 2011, por un valor de 6 130 500 dólares. Hasta la fecha, sigue siendo la joya de esmeralda de una sola piedra más cara jamás vendida.

La esmeralda Taj Mahal de Cartier

La subasta de piedras preciosas Maharajas & Mughal Magnificence tuvo lugar en junio de 2019, ofreciendo joyas y objetos preciosos de la colección Al Thani. Entre los protagonistas indiscutibles de esta subasta, la esmeralda Taj Mahal de Cartier, proveniente de Colombia y con un peso de 141,13 quilates, que, disputada entre coleccionistas privados e instituciones, fue vendida por un valor de alrededor de 2 millones de dólares al final de una subasta de 12 horas.

El collar de esmeraldas y diamantes de la princesa Faiza

Comprado por la princesa egipcia Faiza, hermana del rey Farouk, en 1947, el collar de diamantes y esmeraldas presenta una estructura imponente hecha de diamantes y adornada con gotas de esmeralda. Fue subastada por Christie's en Ginebra en noviembre de 2013, fue comprada por 3 861 000 francos por Van Cleef & Arpels, lo que la convirtió en una joya icónica de la colección de la casa.

El anillo de esmeralda afgano

Vendido en 2015 en Hong Kong, el anillo de esmeralda en cuestión es de origen afgano. Aunque las minas de esmeraldas más conocidas se encuentran en Colombia, también en Afganistán se encuentran yacimientos muy ricos en estas piedras, precisamente en el valle de Panjshir, a unos 130 km al norte de Kabul. Extraída en Afganistán, esta piedra preciosa que pesa 10,11 quilates se caracteriza por una pureza extraordinaria. Vendida por un valor de 225 000 dólares por quilate, hasta la fecha representa el récord mundial de subasta para cualquier esmeralda proveniente de Afganistán.

El broche de esmeralda de Catalina la Grande

La colección de joyas de Catalina la Grande es particularmente conocida entre los expertos del sector. La emperatriz tenía una gran pasión por las esmeraldas y en su colección figuran algunas de las esmeraldas más grandes que existían en ese momento. El broche de esmeralda de Catalina la Grande pesaba unos 65 quilates y fue vendido por Christie's en Nueva York el 22 de abril de 2010 por un precio de 1 650 500 dólares.

El collar Palmette de Edmond Chin para la Maison Boghossian

El collar “Palmette” de esmeraldas y diamantes fue comprado por Edmond Chin, director creativo de la Maison Boghossian, una de las pocas casas de joyería de dirección familiar del mundo. En mayo de 2017, en Hong Kong, Edmond Chin presentó esta hermosa creación: un collar con 11 esmeraldas colombianas, que van de 12,34 a 3,03 quilates y que no muestran signos de alteración de la claridad. El collar fue vendido a un coleccionista privado asiático a un precio de 6 millones de dólares.

Los pendientes de esmeraldas Grand Muzos

De Muzo, en los Andes colombianos, se extrajeron las piedras de este par de pendientes, que pesan 23,34 y 23,18 quilates, ambos de color verde homogéneo y saturado. Sin ningún tratamiento, los pendientes de esmeralda Gran Muzos fueron propuestos por primera vez por Christie's en 2012, por un valor de 4,2 millones de dólares. En 2019 se presentaron por segunda vez y se vendieron por 4,5 millones de dólares, lo que demuestra la continua demanda de joyas y piedras preciosas de la más alta calidad.

Patiño, el collar de esmeraldas y diamantes de Cartier

Simón Iturri Patiño (1860-1947) era conocido también como “el Rockefeller de los Andes” y controlaba cerca del 60 % de la producción mundial de estaño. A lo largo de su vida, desarrolló un ojo de conocedor para las gemas más raras: su colección incluía este refinado collar de esmeraldas y diamantes, que contiene más de 100 quilates de esmeraldas colombianas de la mejor calidad y 60 quilates de diamantes, montados por Cartier en 1937. Vendido por Christie's en Ginebra en noviembre de 2013, el collar Patiño hizo el segundo precio más alto para una joya de esmeralda en la historia de las subastas, a saber, 9 125 000 francos.

La esmeralda imperial de la gran duquesa Vladimir de Rusia

Se trata de una piedra legendaria que pesa 75,61 quilates, que durante más de 100 años fue una de las piezas más importantes de la colección imperial rusa, antes de que el zar Alejandro II la donara a la gran duquesa Vladimir en 1874, el gran duque Vladimir Alexandrovich. En 1920, a la muerte de la gran duquesa, fue dejada en herencia a su hijo, el gran duque Boris, antes de pasar a manos de grandes coleccionistas como Pierre Cartier. Propuesto por Christie's en una subasta en Ginebra en mayo de 2019, fue comprado por un coleccionista privado por 4,5 millones de dólares, casi el doble de la estimación mínima.