11/25/2024|diamantes
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Como mencionamos en un artículo anterior de nuestro blog, los certificados de diamantes son documentos que, además de confirmar su autenticidad, describen sus características mediante escalas específicas de clasificación. El certificado también detalla las proporciones y, en algunos casos, incluye un mapeo de las inclusiones. Esta última característica, además de proporcionar información sobre el origen de la piedra, también garantiza que el certificado corresponda específicamente a ese diamante.
Es bastante raro que una persona compre un diamante sin certificado, no solo porque se corre el riesgo de adquirir una falsificación, sino también porque el precio de una piedra se determina principalmente por sus características y su clasificación. Por lo tanto, el certificado no solo confirma su autenticidad, sino que también ofrece una idea de su valor en el mercado: nos indica qué estamos comprando exactamente. Lo mismo ocurre al vender: si queremos vender un diamante, el certificado indica precisamente qué estamos vendiendo.
Debido a su posible impacto en el mercado, es crucial que las certificaciones de diamantes sean emitidas por organizaciones altamente especializadas y, lo que es más importante aún, que sean imparciales, es decir, que no tengan afiliación a ninguna joyería, casas de subastas, mayoristas, etc. Los principales organismos de certificación son GIA, IGI, HRD y AGS. En este artículo, analizaremos las diferencias entre estas certificaciones.
Fundado en 1931 como una organización educativa para la industria de la joyería y las piedras preciosas sin fines de lucro, el Instituto Gemológico de América (GIA) tiene como objetivo proporcionar opiniones independientes y objetivas sobre la calidad de los diamantes. El GIA debe su reputación a la creación del primer Sistema de Clasificación Internacional, reconocido en todo el mundo: las famosas 4C.
Existen tres diferentes tipos de certificación GIA:
La certificación GIA se marca con una pequeña inscripción (invisible a simple vista) en el borde de la piedra.
Miles de gemólogos son capacitados por este instituto cada año. Sus estándares son reconocidos mundialmente como el punto de referencia para la clasificación de piedras preciosas. El Instituto Gemológico de América ha evaluado algunas de las piedras más famosas y significativas de la historia. Por tal motivo, un certificado del GIA se considera una señal de calidad y prestigio, lo que a menudo aumenta el valor de un diamante.
En 1975, el Instituto Gemológico Internacional (IGI) fue fundado en Amberes como un pequeño laboratorio con tan solo tres empleados. Se ha convertido en una de las instituciones líderes de la industria, con laboratorios en Nueva York, Bangkok, Bombay y Tokio. Entre sus logros, el IGI posee la patente para el grabado láser en diamantes como parte del proceso de certificación y fue pionero en la práctica de sellar los diamantes en blísteres especiales después de la clasificación.
El IGI, al igual que el GIA, también proporciona diferentes tipos de certificación.
El certificado IGI de diamantes es uno de los más utilizados por los joyeros debido a su práctico formato. Además, el IGI fue la primera institución en emitir certificaciones de identificación específicas para joyas.
El Hoge Raad voor Diamant (HRD), que en flamenco se traduce como el "Consejo Superior del Diamante", fue fundado en 1973 en Amberes y es el único representante oficialmente reconocido de los diamantes belgas, tanto a nivel comercial como industrial. El Laboratorio de Certificación HRD es uno de los más grandes del mundo y goza de una excelente reputación por su calidad e imparcialidad.
Las certificaciones emitidas por HRD son las siguientes:
Obtener un certificado de HRD no es tarea fácil, ya que esta institución evalúa los diamantes de acuerdo a los más altos estándares y con equipos sofisticados. Por este motivo, representa una auténtica garantía a la hora de adquirir diamantes como inversión.
Fundada en 1934 por un grupo de joyeros, la American Gem Society (AGS) es conocida por ser una de las primeras en desarrollar informes para diamantes con tallas especializadas (princesa, esmeralda, ovalada, etc.).
AGS emite las siguientes certificaciones:
AGS se fundó con el objetivo de brindar protección a los compradores de joyas. Las empresas que deseen formar parte de esta asociación deben cumplir con los más altos estándares de ética y calidad artesanal, así como ser evaluadas con regularidad. Por esta razón, nunca se cuestiona el valor de una joya que ha sido certificada por AGS.
Todos los institutos gemológicos mencionados en este artículo emiten certificados completamente fiables. No obstante, la clasificación de diamantes sigue siendo un proceso subjetivo, y un mismo diamante podría recibir calificaciones distintas de dos institutos diferentes.
En general, es mejor elegir la organización certificadora en función de la piedra y su uso previsto. GIA es quizás la más exhaustiva y debería considerarse para diamantes más grandes, ya que puede otorgar una calificación inferior por detalles que solo son visibles con un microscopio. IGI proporciona evaluaciones completas pero fáciles de leer y es una de las más utilizadas para la calificación de joyas. HRD representa el estándar más alto y se debe recurrir a ella únicamente si se está absolutamente seguro de la calidad de la piedra. Por último, AGS es el instituto líder en tallas especializadas, el único que ofrece informes enfocados exclusivamente en la calidad del corte. También es importante tener en cuenta que todas las certificaciones tienen una fecha de vencimiento, la cual varía entre 5 y 10 años.
Si tienes la intención de vender un diamante, es fundamental consultar con un especialista cualificado que sepa leer el certificado del diamante (ya que no siempre es sencillo) y pueda evaluar su valor con precisión. Si aún no cuentas con un certificado, Auctentic ofrece una evaluación gratuita realizada por un gemólogo certificado por GIA.